domingo, 9 de octubre de 2011

Europa - Barcelona

Llegamos en avión desde Londres. Luego de discutir un ratito con Tam nos tomamos un micro que nos dejó muy cerca de la casa de David, nuestro anfitrión de la ciudad catalana de Barcelona.

No puedo encontrar palabras para describir esta ciudad. Su hermosura se manifiesta en las calles a partir de la arquitectura de fin del siglo 19 y principios del 20, en edificios como La Pedrera de Gaudí, o la iglesia de la Sagrada Familia (también de Gaudí) o el parque Güell (Gaudí también). Es decir, hay un montón de museos, pero no es necesario entrar a ellos para encontrarse con el arte característico de Barcelona.

Aquí nos quedamos cuatro días. Bah, tres y medio. Esta vez elegimos hacer el bus turístico, porque las distancias a cubrir en Barcelona son bastante grandes. El bondi este es una pegada en ciertos destinos, y este es uno de ellos.

Pudimos ver el museo de arte moderno, la Pedrera, el parque Güell y mucho mas. Pasamos por la Sagrada Familia y nos maravilló, pero no al nivel de La Pedrera. Y todo sin perder tiempo caminando o tomando innecesarios colectivos o subtes. Disfrutamos mucho de la rambla (la común y la de mar), el mercado de La Boquería y la mayoría de las secciones del monte Montjuic.

Esta ciudad le ganó a Paris en belleza, pero por dos pelos, y creo que fue porque simplemente me parece que hay lugar para la gente normal. Paris parece mas para ricos, o gente de muuuucha guita. Quizás tenga que volver a cada ciudad para verificarlo, no?

Bueno, Barcelona tiene de todo, hasta una playa, que incluye su sector nudista. Tetas, culos, pitos y vaginas. Inclusive había pibes pequeños y nadie se horrorizaba.

Ah, la barceloneta, el barrio de la playa. Barrio lindo, al lado del mar, súper copado, lleno de vida y variedad. Hizo que nuestro último día en la ciudad fuera inolvidable.

Partimos de ahí hacia Granada, en un coche nocturno, pero esta vez, la experiencia fue diferente...

martes, 4 de octubre de 2011

Europa - Florencia

Llegamos y gracias al GPS pudimos llegar al hostel rápidamente. Esta vez nos toco hospedarnos en uno mas juvenil, es decir, lleno de pendejos barderos insoportables. Si, ya estamos viejos para ir a hostels.

Bueno, Tam estaba mal con la gamba así que lo tomamos con soda. Recorrimos mucho de Florencia, me subí al domo y contemplé la vista. Hermosa ciudad. Antigua, llena de estatuas, fuentes y monumentos. Mas iglesias que nunca.

Tomamos algún helado y sacamos los pasajes para Venecia y Paris. Fue un día mas que nada de pasear y admirar el arte de la ciudad, pero tranquilos.

A la noche comimos en el hostel y nos fuimos a dormir. Dios, qué quilombo! Fiesta en el mismo hostel hasta no que qué hora de la madrugada. Un desastre. Dormimos como el culo...

Al otro día nos levantamos y nos fuimos a la terminal para tomar el tren a Venecia.

Los tanos son copados, pero tienen el mismo problema que los africanos e hindúes inmigrantes. No saben qué es el desodorante. En este viaje he olido los peores olores a chivo de mi vida. Los peores...

NOTA: no deja pasar tanto tiempo porque después no me acuerdo de lo que hicimos.

lunes, 3 de octubre de 2011

Europa - Londres

Llegamos a Londres luego de cambiar trenes en Lille, que está en la frontera norte de Francia. Ahí subimos al Eurostar, el tren súper rápido que pasa por debajo del mar para dejarnos en Londres. Loco, no?

Dejamos las cosas en la estación y nos fuimos al museo británico. Este museo me pareció muy interesante. Muy bien organizado y completo. Podría decir que aprendimos algo y todo! Eso si, se robaron algo de cada parte del mundo. Llenos de piezas que datan de la época de Babilonia hasta la actualidad. Y gratis.

Por la tarde hicimos el check in en el depto de Florin Ivan, un rumano que vive en Londres pero ha viajado por muchos lugares. Buena onda, pero nada que ver con la onda de Sandie en Paris. Nos dio información, de la buena, y nunca escatimó en detalles. Muy dado. A pesar de eso la onda no fue la mejor, quizás porque nosotros no estamos ya para la charla. El cansancio ya está presente y cada segundo de descanso es utilizado y requerido.

Los días fueron muy nublados, como era de esperarse en una ciudad con la fama de esta, y por primera vez en el viaje nos cagamos de frío. Campera, buzo y demás, para poder aguantar las ráfagas se viento que soplaban esporádicamente.

En nuestra estadía en Camden Town visitamos algunos museos, como el de Ciencias y hasta el mercado del propio barrio que es muy conocido por sus precios y su estilo loco. El Camden Market es muy bonito y lleno de vida rockera: tatuadores, ropa variada y a veces única, looks góticos, y lo que se te ocurra.

También vimos Rock Of Ages en el Picadilly Circus. Mentira, en Leicester Square, que es el mismo lugar donde se pueden comprar entradas "más baratas". Baratas las ganas, pero no tan caras como en la taquilla. Estuvo bueno porque conseguimos bien cerca, en tercera fila, y pudimos pasar dos horas cantando canciones de los 80, a puro hard rock y disfrutando de una historia obvia pero bonita. Nos acordamos del gordo Mati mucho en este contexto tan maraca. Te daban de regalo encendedores linterna para usarlos como en las baladas.

Recorrimos bastante mas. Pasamos por la mayoría de los lugares obvios como el puente de Londres, el Big Ben y la mar en coche. Estoy escribiendo lo que recuerdo en Madrid mientras espero a Tam, así que seguro que olvido mucho. Con las fotos seguro se complementará.

Hicimos mucho, caminamos innumerable cantidad de cuadras, pero nos faltaron lugares. Nos dimos cuenta de lo jodido que es parar unos pocos días en cada destino. Creo que lo ideal sería ir mas días a menos ciudades y conocerlos a fondo, o al menos un poco más que lo que estamos haciendo ahora. Ojo, no reniego, sino que entiendo que de los errores se aprende mucho, y la próxima será mejor, con menos transbordos y maletas quizás.

Los días se nos pasaron volando y el sábado a la mañana ya nos tuvimos que ir a Barcelona, dejando la casa de Florin a las 4 de la matina. Error de principiante. Si el vuelo sale a las 7 tenés que estar de una a dos horas antes en el Aeropuerto, mas el tiempo que necesitas para llegar y despertarte: no es humano despertarse tan temprano. Ganás horas pero perdés energía que no recuperás con un par de horas de sueño (la explicación de mi agotamiento al día de hoy).

En fin, taxi al aeropuerto y a tomarnos el avioncito a la ciudad de Gaudí y Miró.

jueves, 29 de septiembre de 2011

Europa - Paris

Acá estoy, escribiendo sobre Paris con lo que me que me acuerdo, desde Madrid, mientras la china ve cosas de cupcakes y yo descanso en un banco en una vereda escuchando música y escribiendo para vosotros.

Subimos al tren desde Venecia con dirección a Florencia porque el que iba directo a Paris desde ahí ya estaba lleno. Dos horitas de viaje.

Al llegar nos tomamos de toque el tren a Paris. Este no tenía nada que ver con lo que veníamos utilizando. Vagones viejos, mucho olor y mucha oscuridad. Cuando vas a arrancar un viaje largo en un medio que no junás, y en condiciones que objetás, debés tratar de ponerle onda, pero se puso jodido.

Compartimos el vagón con tres chicas chinas y un hindú. No olían tan mal cómo uno hubiera imaginado, pero los de al lado eran seis sucios que intoxicaban todo nuestro camarote. Sé cómo suena, pero es la posta. No se podía estar. Será educativo, súper justificable y entendible, pero no sabían qué er el desodorante estos muchachos/as.

Para hacerla corta, fueron 12 horas de mierda, pero que finalmente nos condujeron a Paris. Luego de bajar y combinar algunas líneas de metro pudimos llegar a la casa de Sandie. Cinco pisos por escalera, con Tam que no podía hacer fuerza, y dos maletas que para mi eran mas grandes que dos casas rodantes. Olvidable.

Aprendizaje: pensar en los imprevistos. Ser pesimista está bien. Nunca más sin ascensor y con tanta ropa. La ropa sucia se soluciona con un lavadero, pero el peso extra no.

Nuestra anfitriona nos recibió un poco secota, pero con onda. Al pasar los días nos dimos cuenta de que simplemente fue la reacción inicial. Sandie se portó de lujo. Ah, y tiene una gatita hermosa que se llama Zelda. Punto a favor, sin dudas.

Paris es monumental. Sus edificios fueron los primeros que estuvieron a la altura de mis expectativas europeas. Todos de 5 pisos, y con una fachada similar. Por dentro pequeños y como el depto de Grigori (nuestro hogar en Atenas), muy organizados y aprovechando al máximo el espacio. No se puede generalizar pero me dio esa sensación.

Para rosh hashana, como no encontramos un lugar de la cole para comer, nos fuimos a un lindo bar con música, y luego al museo erótico. En el primero nos desatendieron bastante ya que había una mesa de yankees que acapararon el servicio del lugar, pero la música era muy buena. Pianista medio borracho mas una piba que cantaba muy bien. Buen gusto en canciones. Qué mas, no?

Conocimos la monumental torre Eiffel. Subimos y disfrutamos de la vista increíble. Vale la pena subir y recorrer todos sus alrededores.

Uno de los días pudimos combinar con Michel, un programador amigo de Argentina, y Paula, su mujer, para que nos mostraran algo del Paris que no conocemos. Ellos han vivido allí en mas de una oportunidad y se coparon con pasar una tarde junto a nosotros. En fin, salimos de la puerta de Notre Dame (impresionante e incomparable con otras construcciones del mismo tipo) y comenzamos a recorrer Paris. El latin quarter, viviendas de gente conocida, el Siena, los jardines de Luxemburgo, el Panteón y mucho mas. Pero la cosa se cagó. En el apuro omitimos decirles que Tam estaba mal de la gamba y fuimos a un ritmo fatal, que luego de tres horas, le pasó factura: no podía mover la gamba. Paula y Michel se re coparon y nos dieron una mano yendo al hospital con nosotros. Les debemos una grande, en serio, porque nos facilitaron la comunicación con los médicos y se quedaron ahí, haciendo el aguante, cuando nosotros más lo necesitábamos. Assist Card fue un desastre pero pudimos igualmente salir adelante (estoy en Madrid escribiendo esto, así que la cosa debe haberse solucionado, no?)

El ultimo día me fui al museo Louvre solo (Tam se fue con Sandie al Cupcake Camp). Qué elección! Era el día gratis, así que la gente que había en el recinto era incontable. Tres cuadras de cola. A pesar de esto pude disfrutar bastante. Vi las obras clásicas, incluyendo la Mona Lisa y la Venus de Milo, y luego me retiré completamente desgastado a buscar a las chicas a un barrio que no junaba pero que tenía un canal en el medio y que era muy bohemio y carente de turistas. Me doy cuenta de que esos son los barrios que me copan... Los posta, los que no están viciados por el negocio del turismo. Volvimos y comimos sushi francés. Según Tam no se compara con el casero de Majito, y puede que tenga razón.

En sumatoria, nos deberíamos haber quedado tres semanas solo en Paris. Súper lindo, inmenso y con mucho pendiente de recorrer.

Es el único lugar que perdura en mi cabeza como un potencial destino para pasar un tiempo. Vivir no, pero sí hacer la experiencia de estar un buen rato, digamos... Unos 6 meses?

Volveremos, con un poco de suerte.

martes, 27 de septiembre de 2011

Europa - Venecia

Qué flash!

Arribamos con el tren desde Florencia que nos dejó a 20 metros del canal principal.

Venecia es muy diferente, como se imaginarán. No hay autos, ni motos. Solo botes de diferentes tamaños, motores y calidades. Caminas o andas en alguno de estos transportes. Mucha escalera, mucho puente y mucho pasaje. Nos costó un huevo ubicar el hostel, pero lo logramos luego de 1 hora de dar vueltas y pasar por la puerta del mismo. Era una puertita diminuta.

Venecia es muy linda y tiene, como la mayoría de los países europeos, mil iglesias y monumentos. Debo confesar que eso, a esta altura, es lo que menos me interesa. Son todas parecidas y en la mayoría de los casos, siempre devotas de Cristo... Y yo que no creo en dios. Será posible!!! Bueno, vimos un poco pero no pudimos hacer mucho de lo obvio por que la mayoría estaba cerrado. Aprovechamos entonces para hacer lo que mas acostumbramos: caminar. Recorrimos, en menos de dos días, un 70% de Venecia. Fuimos hasta a un barrio muy lejos que solo tenía población local. Obvio, súper tranquilo y limpio, a diferencia de las zonas más céntricas. Tomamos heladitos y todo! Del mejor del viaje les diría...

Al segundo día tomamos la góndola. Dimos un paseo muy lindo por los canales internos y disfrutamos de los comentarios del señor gondolero. Había otras opciones para andar por los canales pero era como recorrer Buenos Aires en colectivo: un bajón.

Yo diría que Venecia es un lugar que hay que visitar, pero quizás mas tiempo. Hay un par de islas que nos quedaron en el tintero, y hubiera sido lindo ir a conocerlas.

Por la noche nos tomamos el tren de Venecia a Florencia para combinar con el tren nocturno a Paris. No sabíamos la que nos esperaba...

lunes, 26 de septiembre de 2011

Europa - Roma - Día 3

Me fui solo al Vaticano. Día gratis en los museos, así que había un mar de personas.

9:12 Arranqué a hacer la cola.
9:29 Doblé la esquina.
9:39 Casi doblando de vuelta, aun no.
9:41 Aceleramos. Ya doblé otra vez. Cuanta monja, che.
9:50 Primero respetas las fila, y no te pasas pero luego vas transgrediendo todo... Porque sino quedas afuera Eso se aprende en la cola para entrar al Vaticano el día gratis.
10:02 Cerca. Leí por ahí que a las 12:30 dejan de entrar personas. Menos mal que vine temprano. Lastima que la China no vino.
10:10 Estoy adentro. Cuanto mármol, cuantas esculturas compradas por el Vaticano. Te hace pensar un par de cosas (Propaganda?)

11:00 Estoy en la capilla sixtina. Realmente me sobrepasa esto. Hay cosas que son difíciles de explicar. Una de estas es esa.
No se puede sacar fotos, pero la gente no respeta. Sacan igual.
No importa la religión, la etnia, ni el país de origen. Falta de respeto total.
La capilla sixtina es una gran habitación, muy grande, casi como un galpón. De altura podría decir que tiene al menos 10 metros. Imponente. Este es el laburo de una sola persona? No se puede creer. Me gustaría saber más en este momento.

Hay gente magnífica y extraordinaria. Si hay algo que he aprendido en este viaje es eso. Impresionantes culturas que lograron construir impactantes obras.

Roma es la que más me ha impactado por ahora. Quizás porque es la que más ha perdurado en el tiempo. Atenas estaba bastante destruida, y fue bastante difícil imaginarse qué estábamos viendo.

Nota: A una argentina jetona la agarraron sacando foto. Se quejó diciendo: Por qué a mi? Todos sacan fotos.
Siempre lo mismo: si los demás lo hacen está bien. Patético. Los demás te definen?

En fin, a seguir intentando entender esto.

Tuve que salir del museo del Vaticano para poder subir a la cúpula de la basílica de san Pedro. Cola otra vez, y encima hay que pagar para subir. Ah, 500 escalones interminables. Eso si, la vista es increíble. Se ve Roma completamente, y corre un aire que en ese momento, luego de la subida, es más que apreciado.

Bajé y caminé mucho pero mucho recorriendo otras partes que no había visitado de Roma. Muchas iglesias, mucha admiración a dios que aun hoy me cuesta entender, mucho vendedor de souvenir.

La ciudad como ciudad es muy hermosa, y el pensar en cómo fue construida me fascina. Las casas actuales fueron construidas arriba de las anteriores, y esas sobre otras. La idea es que es mas simple agregar que sacar y hacer de nuevo. Eso da como resultado lo que uno ve en cada recoveco.

Volví para buscar a Tam e irnos a comer algo dulce. Ya la extrañaba. Probamos canolli! Rico pero nada maravilloso. Nuestras facturas más ricas para mi. Listo, lo dije!

Luego nos fuimos a caminar, y finalmente comimos en el restaurante frente al hostel. Finalmente nos fuimos al sobre, porque al otro día nos teníamos que ir a Florencia.




Europa - Roma - Día 1

Tomamos el avión desde Atenas bien temprano y arribamos al aeropuerto Fiumicino cerca de las 11. Nos tomamos un shuttle (que no es otra cosa que un auto rural/weekend típico donde entran 10 personas) y en una hora estábamos en el hostel.

Qué desastre, por favor. Quedaba a 10 cuadras de Roma Termini, pero eso no era lo peor. Nos atendió un chabón fatal, todo sudado, intentando hablar algún idioma parecido al español, que nos dio una habitación olvidable: dos catres de diferente altura pegados, unas sillas sucias, un piso lleno de pelos y pelusa, más un innumerable conjunto de cosas cuestionables, que no estábamos dispuestos a sufrir.

Lo puteamos y reclamamos nuestro dinero. El salame nos lo devolvió arregañadientes, pero lo hizo. Con mucha bronca salimos a la búsqueda de reemplazo. Por suerte caímos en uno que se llamaba A&C Much More, muy recomendable, que nos quedaba cerca de la estación y que salía un poco más pero que no tenía ninguno de esos defectos antes mencionados.

Luego de hacer el checkin nos fuimos a comer y a dar vueltas por Roma. Probamos los helados de Roma, y nos resultaron muy ricos.
Pizza finiiiiiiiita, finita. 

Heladito de frutilla, como siempre, y alguna otra cosa para probar. 

Chocolate, como siempre, y alguna otra cosa bomba.

Escaleras por todos lados.

Entramos a esta iglesia, monumental, pero ahora me da fiaca buscar el nombre ella.
El cielo, el infierno... un patrón que se repetirá en cada lugar que visitemos.

La muerte.


La cúpulas de cada una de éstas basílicas, iglesias, capillass, etc suelen ser increíbles.
Imperdibles.



Pasamos por el coliseo (no entramos), el foro imperial, la fontana di trevi, y piazza spagna, donde hay unas escalinatas donde se junta toda la gente. Muy pintoresco. Había shows de capoheira y un montón de árabes vendiendo todos lo mismo: un tomate de plástico loco, unas pinturas del lugar, un laser y alguna huevada más. Eran mil, y si llegabas a mirarlos te apalabraban como si fuera la venta del siglo. Un embole.

No entramos ese día. Estábamos dando vueltas nada más. 




El foro imperial, cerrado por obras. 


Fuentes para recargar tu botellita por todos lados. 

Tirando la moneda en la Fontana di Trevi. 


China tirando monedas... bueh, se le habrá caído :)




Piazza Spagna, donde qué se podía hacer? Beber.  

Juego: Encuentra al chino!


Juego: Encuentra a la china!


Lleno de carritos para comprar basurita para comer.
Por todo Europa (Grecia e Italia por ahora) está lleno de estos autitos pequeños llamados Smart. A Tam le fascinaron. Hay de miles de colores y diseños. Solo para dos personas, y creo que eléctricos.



Y ese fue el primer día en Roma.

sábado, 24 de septiembre de 2011

Europa - Día 16 y 17 - Atenas

o fueY todo no podía salir bien. Arrancamos bastante como el culo.

Tomamos el ferry de Mykonos a Rafina, una ciudad cercana a Atenas, con la idea de tomar un micro a Atenas ahí mismo. Apenas arribamos había dos posibilidades. Un micro al centro de Atenas y otro al aeropuerto de Rafina. Qué? Si. Lo que queríamos no existía.







Nos tomamos el micro al centro, que nos dejaba bastante mal, con la idea de tomar el metro, el tren u otra cosa desde. No contábamos con que a la mayoría de los griegos lea chupa un huevo otro idioma que no sea el de ellos. Parecen yankees.

Tengo que aclarar que luego de todo el quilombo nos enteramos que el Atenas no tiene aeropuerto en la ciudad sino que el que se conoce como aeropuerto de Atenas es el de Rafina. Lo que es no haber hecho una investigación antes.

Entre que el idioma y su alfabeto no ayudan, y nosotros que nos perdemos fácil, nos logramos comunicar algo y tomamos el tren. Para hacer corta una historia que no lo fue les cuento que llegamos luego de recorrer el puerto de Pireous, y volver por sobre nuestros pasos logramos llegar al depto. de Grigori. Tomamos tren, tram y metro, y todo para llegar a la base de operaciones. Arrancamos como el culo.

Les recuerdo que en muchos casos nos quedamos en casas de personas, en una habitación libre o directamente en departamentos libres. En este caso nos quedamos en una habitación muy linda en la casa de Grigori.


Súper ordenado el chabón. Todo en su lugar. Nada de más, nada de menos. Muy cordial, el holandés.

A la noche, para no desperdiciar el día, pusimos onda y nos fuimos para Monasteraki, que es el barrio céntrico de Atenas. Mientras dábamos vueltas, por el frente, se asomó la cima iluminada de la acrópolis. Un flash. El paisaje iluminado es hermoso y es inevitable no sacarse una foto.

Caminamos, comimos Mousaka (lasagna con carne tipo árabe) y un omelette griego (queso, tomate y salchicha) para luego volver en Tram a la casa de Grigori. A bañarse, que se acaba el día!






Al otro día, sabiendo del paro de transporte, Grigori se ofreció a llevarnos en su auto. Sin esa acción nos hubiéramos quedado varados en si barrio sin posibilidad de llegar a la acrópolis en nuestro único día en Atenas (perdimos el primero con lo que nos costó llegar). Hemos dado con mucha gente solidaria en este viaje. El tipo no tenía porque hacerlo, pero se copó.

En fin, Grigori nos tiro en la plaza Sintagma y de ahí pateamos hacia la acrópolis. Compramos el pase para las 7 atracciones del circuito Acrópolis, como para sacarle el jugo a este día.

La acrópolis se parece a la construcción de Masadá (mencionada en otro post anterior, de Israel), quizás porque ambos fueron construidos por la misma época y con el mismo estilo. Ambos arriba de un monte, ambos para albergar a los ricos de ese tiempo, ambos destruidos luego por la historia que los continuó. Haber visto lo que sucedió en Israel con los griegos y los romanos fue muy útil a la hora de unir los puntos con lo que se ve aquí en Atenas y lo que probablemente veremos en los demás países (lo estoy escribiendo desde Roma mientras la china duerme un poquito).

En la entrada

Herod Atticus: Anfiteatro reconstruído






Lleno de gente, tardamos media hora en subir. Mucho grupo con guías, muchos viejos que van porque hay que ir, pero tienen más ganas de ir a comer algo que de aprender y entender un poco más la historia que nos precede.

Acá habían pocas personas, aí que imaginen lo que era en realidad. 







Están reconstruyendo toda la Acrópolis desde hace 20 años y aun no terminan. Es entendible, teniendo en cuenta que se tardaron miles de años en construir originalmente, pero molesta a la hora de apreciar las estructuras: está lleno de andamios y zonas cerradas al público.
Así eran los tractores en la antigua Grecia :)


Bajando... 




Seguimos viaje hacia la Antigua Agora. Era un mercado griego que fue tapado por los persas y luego encontrado y transformado en museo. Expone artículos de diferentes rubros, todos encontrados bajo tierra. Mucho relacionado con cómo se enterraba a la gente en aquel entonces.






Un escudo... flor de tamaño. Lo que debía ser el brazo del guerrero que lo portaba. 










Paramos a comer algo rápido y barato. Everest fue la  opción.




Luego seguimos viendo el resto de los sitios históricos, y recorriendo la ciudad. El recorrido fue largo y lleno de lugares impactantes (bueh, algunos no tanto). Uno de ellos fue el Teatro de Dionisio.

 



Hubo mucho más, pero tengo que ir dándole fin a este artículo porque se me hace tarde para ir al vaticano, y ustedes saben lo bien que quiero quedar antes el papa!

Para terminar, y scarnos unpoco de cultura de encima, nos fuimos al Hard Rock Café de Atenas a comer algo a la noche, mientras esperábamos que nos levantara Grigori.

La plaza de Monasteraki

Pintó frio...

Iglesias por todos lados. De todos los tamaños...

Una viola firmada por Carlitos Santana

Este traje lo usó Prince para la película Purple Rain-

Parche del bombo del batero de Lynch Mob.

Bajo de Duff que se usó para grabar Use Your Illusion. 


Viola de Metallica, probablemente de James Hetfield.

Qué foto teenager te mandaste acá...

Remera de Bon Jovi

Cansados los chinos de tanto movimiento
Me gustó Atenas. El idioma y su alfabeto me molestaron bastante, pero la ciudad en si, y su gente puedo decir que nos trataron muy bien. Lo único negativo fue nuestra experiencia en Pireous tratando de llegar. La gran lección aprendida es que hay que saber cómo llegar al centro de operaciones (donde uno se hospeda). De ahí en más todo es fácil.

Nos vemos en Roma!

LINK para mi: http://www.athensguide.com/acropolis.html